¡Qué maravilla de alabanza, estimado hermano! Me ha traído la presencia de mi adorado Jesucristo, ¡cuánta ternura siento por él! Su sacrificio y sus heridas viven en mí. Porque él se entregó al martirio y a la muerte por amor a nosotros. Él es aquel a quien ama mi alma. Gracias hermano por compartir esta hermosa alabanza, y por dejar esta hermosa palabra que nos da mucha fe. "Joven fuí y he envejecido, y no he visto justo desamparado ni a su simiente que mendigue pan." Te invito a visitar mi blog cristiano cuyo link es: http://porelvalledelosaromas.blogspot.com Allí narro mis experiencias espirituales y también comparto escrito muy interesantes de interés cristiano, y mis poemas inspirados en Dios. Serás bienvenido. Un cordial saludo. Ingrid Zetterberg
¡Qué maravilla de alabanza, estimado hermano! Me ha traído la presencia de mi adorado Jesucristo, ¡cuánta ternura siento por él! Su sacrificio y sus heridas viven en mí. Porque él se entregó al martirio y a la muerte por amor a nosotros. Él es aquel a quien ama mi alma. Gracias hermano por compartir esta hermosa alabanza, y por dejar esta hermosa palabra que nos da mucha fe. "Joven fuí y he envejecido, y no he visto justo desamparado ni a su simiente que mendigue pan." Te invito a visitar mi blog cristiano cuyo link es: http://porelvalledelosaromas.blogspot.com Allí narro mis experiencias espirituales y también comparto escrito muy interesantes de interés cristiano, y mis poemas inspirados en Dios. Serás bienvenido. Un cordial saludo. Ingrid Zetterberg
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